Texto de Juan José Lorente, Socio Área Financiera Globalwyp
Si buscamos el significado de Gestión Financiera, podremos encontrar numerosas definiciones. De todas ellas, la que considero más acertada es la que la define como “El arte y la ciencia de administrar el dinero”. Arte como sinónimo de capacidad, habilidad, destreza. Ciencia (del latín scientia “conocimiento”), como sistema ordenado de conocimientos que estudia, investiga e interpreta los fenómenos (en este caso social como son las finanzas). Así que, podemos decir que para realizar la Gestión Financiera de la empresa es necesario tener conocimientos y habilidades, adquiridos tanto por el estudio como por la experiencia profesional.
Sabiendo lo que entendemos por Gestión Financiera, podemos entrar ya en cuales son, en mi opinión, los 10 Principios Básicos para la Gestión Financiera de una empresa. ¡Así que, vamos allá!
1º. – Equilibrio entre Riesgo y Beneficio.
El riesgo de toda empresa es no ser capaz de pagar tus compromisos de pago a su vencimiento → Balance de Situación.
El Beneficio es la diferencia entre los Ingresos y los Gastos → Cuenta de Resultados (Pérdidas y Ganancias)
Tan importante es gestionar tu Cuenta de Resultados como tu Balance de Situación.
Esto es algo que habitualmente las empresas olvidan, centrándose en demasía en el Resultado del negocio, y olvidando de gestionar sus Activos y Pasivos representados en el Balance de Situación. Una buena Gestión Financiera pasa por gestionar ambos, y conseguir un equilibrio entre la Rentabilidad y la Estructura Financiera de la empresa.
2º. – La Caja, y no el Beneficio, es lo que manda.
Muchas empresas se cuestionan si su negocio es rentable ¿por qué no generan caja? ¿dónde está el dinero?
- Con tus clientes: ¿Cuál es el Periodo Medio de Cobro de tu empresa? ¿Hay Morosidad?
- En existencias en tu almacén: ¿Ha aumentado tu stock? ¿Hay Baja rotación? ¿El Stock es/está obsoleto?
- En inmovilizado: ¿Tienes Inversiones en Activos no corrientes financiados con fondos de circulante?
- Destinado al pago de la deuda bancaria: ¿Calculas el Cash Flow de tu negocio?
Gestiona tu Flujo de Caja. Realiza un Plan de Tesorería de corto, medio y largo plazo.
3º. – Diversifica el riesgo.
En los negocios la concentración es igual a riesgo.
- ¿En cuántas líneas de negocio y nichos de mercado compite tu empresa?
- ¿Qué porcentaje sobre el total de tus ventas representa tu/s principal/es cliente/s?
- ¿El suministro de tus materias primas o mercaderías están concentradas en un único proveedor?
- ¿Operas únicamente con “el banco de toda la vida”?
Diversifica.
4º. – Piensa y valora el coste de oportunidad.
El coste de oportunidad es aquel en el que se incurre al tomar una decisión y no otra.
Los recursos en una empresa son, generalmente, escasos, así que hay que elegir.
- ¿Invierto en una nueva máquina para aumentar mi producción, o en una flota de vehículos para mejorar la logística?
- ¿Contrato un nuevo comercial para captar nuevos clientes o aumento stock de productos terminados?
Planifica donde colocas tus recursos.

5º. – Estructura financiera equilibrada.
- Mantén un equilibrio entre los Fondos Propios y los Fondos Ajenos.
- Productos de financiación a largo plazo: préstamo, leasing, renting, capital riesgo, …
- Productos de financiación a corto plazo: póliza de crédito, línea de descuento, factoring, confirming, …
Financia tus inversiones de Activo no corriente a largo plazo y el Activo corriente a corto plazo… ¡y también a largo!
6º. – No te “cases” con ningún banco.
El banco es el proveedor de tu recurso más preciado. Así que no pongas “todos los huevos en la misma cesta”, por muy pequeño que seas. Gestiona tu Pool bancario:
- No concentres tu financiación ajena en un solo banco.
- Diversifica entre tus bancos tanto tu financiación a corto plazo como a largo plazo.
- Negocia continuamente tus condiciones financieras.
7º. – Conoce tu estructura de costes.
Diría que este es de los principios más importantes de la Gestión Financiera, y que las empresas le dan poca importancia. Es muy significativo el número de empresas que desconocen sus centros de coste y generación de valor de su negocio: consumos, coste de producción o prestación del servicio, coste comercialización, coste logístico, costes de estructura y financieros.
8º. – La Contabilidad Financiera no es suficiente para realizar una Gestión Financiera eficaz.
La contabilidad financiera es el registro de todos los hechos económicos acaecidos en una empresa. Uno de sus objetivos, principal y casi único para muchas empresas, es cumplir con las obligaciones mercantiles y fiscales.
Es crucial llevar una Contabilidad Analítica (o de Costes): sistema de información que mide y representa el flujo interno de generación de valor de la empresa.
- Diferencia las líneas de negocio.
- Diferencia tus centros de coste.
- Diferencia tus tipos de coste.
Adapta tu contabilidad financiera y sistemas de gestión para obtener tu contabilidad analítica.
9º. – Controla y vigila tu negocio.
Realiza cierres contables mensuales completos, no únicamente el de cierre del ejercicio (variación de existencias, amortizaciones, periodificaciones, provisiones, …).
Analiza:
- Cuenta de Resultados Analítica y Balance de Situación.
- Indicadores de gestión, ratios→ Cuadro de Mando Económico-Financiero
Dedícale 12 días o “ratos” al año para conocer la evolución y resultado de tu negocio.
10º. – Visión de futuro.
Planifica el medio y largo plazo: márcate objetivos, calcula los recursos y financiación necesaria para alcanzarlos, controla el alcance y desviación de estos, …
Haz un Presupuesto Anual de tu negocio…y trienal.
Una buena Gestión Financiera es clave para la buena marcha de todo proyecto empresarial, independientemente de la fase en la que se encuentre. Pensemos que cualquier decisión en cualquier área de la empresa tiene repercusión en las finanzas de la misma, por lo que una buena información financiera es clave para la toma de decisiones que marcarán el futuro de la empresa.
